Meses después de asegurar que el actual presidente de Estados Unidos y por entonces candidato Donald Trump estaba en perfectas condiciones para asumir el poder, ayer el ex médico personal del republicano aseguró que dijo lo que dijo porque Trump se lo dictó.
El profesional hizo así referencia a la carta que Trump citó en diciembre de 2015 para alardear de su aparentemente excelente estado de salud, un texto que ahora el médico asegura que el presidente le “dictó”. De hecho, confesó que escribió la carta apresuradamente mientras el auto del actual mandatario lo esperaba.
Allí, decía cosas como: “De ser elegido el señor Trump, puedo decir sin lugar a dudas, que será el individuo con mejor salud en resultar electo presidente”.
Los nuevos comentarios de Bornstein llegan en momentos en que el médico está nuevamente en el centro de la tormenta luego de que le dijera a la cadena NBC que un grupo de guardaespaldas fuera a su oficina el año pasado y confiscara los registros médicos del presidente.
“Deben haber estado aquí entre 25 y 30 minutos. Hicieron un enorme caos”, declaró Bornstein y señaló que el incidente hizo que se sintiera “violado, asustado y triste”. Asimismo, señaló que fue robada la copia original y única de la ficha de Trump, incluyendo exámenes de laboratorio.
Este suceso tuvo lugar luego de que el profesional admitiera al diario The New York Timesque el magnate tomaba un fármaco para el crecimiento del pelo que lo hizo sentir “violentado, aterrorizado y triste”.
Sin embargo, la vocera de la Casa Blanca , Sarah Sanders, negó que se haya tratado de un raid y sostuvo que los documentos fueron removidos de la unidad médica de la Casa Blanca como procedimiento estándar durante la transición.
Bornstein fue el médico personal de Trump por 36 años hasta hace meses, cuando se desató esta polémica sobre el producto para el cabello.
Desde que asumió, y a causa de algunos de su comportamientos que preocupan por su falta de protocolo, Donald Trump es señalado por una buena parte del pueblo de Estados Unidos por no tener la salud mental necesaria para dirigir Washington.