Créditos: Joel Suncar / Marlyn Valdez
Información: AGN
Ciudad de Guatemala, 12 may (AGN).- La decisión del Gobierno de Guatemala de pedir el retiro de los embajadores de Venezuela, Elena Alicia Salcedo, y del Reino de Suecia, Anders Kompass, fue interpretada hoy como coherente por el sector industrial guatemalteco y un analista independiente consultados por la Agencia Guatemalteca de Noticia (AGN).
“Ese modelo (venezolano) a todas luces no respeta los derechos humanos, no respeta la libertad empresarial, crea más pobreza y confrontación. No es un modelo que necesita Guatemala”, afirmó Javier Zepeda, director ejecutivo de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG).
Afirmó que Salcedo, tal como publicaron medios de prensa privados, “participó y motivó (para lograr) que el modelo político de su país se replique en Guatemala”, lo cual es considerado como una injerencia en asuntos internos del país centroamericano.
Agregó que respeta la decisión del Gobierno de solicitar el retiro de la embajadora venezolana y también de Anders Kompass, de Suecia, aunque aclaró que de este último desconoce los detalles.
“Respetamos la decisión del Gobierno, son decisiones diplomáticas que se tienen que resolver por la vía diplomática”, enfatizó.
Foto. youtube.com
Apoya decisión
El analista independiente, Nicholas Virzi, aplaudió la decisión de Guatemala pues manifestó que la embajadora venezolana se entrometió en actividades que no le competen. Además, recordó que Suecia ha apoyado a “grupos contestatarios” que promueven la conflictividad.
“Lo de Venezuela debió hacerse hace años. Guatemala debe alinearse con la política exterior de Estados Unidos. Venezuela es una amenaza socialista, por eso la población de ese país está huyendo”, manifestó.
Virzi, también catedrático universitario y ex vicepresidente de la Cámara de Comercio Guatemalteco Americana (AmCham), indicó que Salcedo “andaba metida en actividades que no le competen”. Respecto a la solicitud del gobierno aseveró: “En hora buena que se haya hecho”.
Consideró que Guatemala realiza esfuerzos por elevar su nivel de competitividad y atraer inversiones para generar más empleo para los guatemaltecos y que este tipo de “injerencias” contribuye a desestimular la actividad económica.
Cuestiona a Suecia
Respecto al retiro de Kompass, el analista aseveró que por muchos años los aportes económicos de la embajada sueca han sido cuestionados por aliarse con grupos de izquierda que afectan a Guatemala.
“La intromisión de Suecia ha sido mal vista pero otros gobiernos no habían tomado medidas. Sectores económicos han cuestionado el rol de Suecia por el apoyo a grupos contestatarios que son vistos como promotores de la conflictividad social”, sentenció.
Agregó que la cooperación de ese país no es bien vista en Guatemala porque financia ataques contra sectores económicos y eso afecta la competitividad.