El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, expresó en la conferencia de prensa realizada en el Palacio Nacional de la Cultura de Guatemala que la migración ilegal de centroamericanos a su país debe terminar y advirtió sobre la necesidad de que el respeto a las fronteras sea mutua, entre países aliados, esto tras la reunión multilateral que se realizó con los mandatarios de Guatemala, El Salvador y Honduras.
“Desde mi corazón y del pueblo estadounidense les digo: ustedes son nuestros vecinos y queremos que sus naciones prosperen, pero no vengan a Estados Unidos ilegalmente, no pongan en riesgos sus vidas” – Vp @mike_pence pic.twitter.com/UmKln1Utx8
— Gobierno Guatemala (@GuatemalaGob) June 29, 2018
“Si nosotros respetamos su soberanía, sus fronteras, nosotros exigimos que ustedes respeten la nuestra”, dijo el vicemandatario estadounidense en una declaración al término de su reunión en la capital guatemalteca con los presidentes de Guatemala, Jimmy Morales; El Salvador, Salvador Sánchez Cerén; y Honduras, Juan Orlando Hernández.
Aclaró que si bien su Gobierno se opone a que continúe la migración ilegal “también vamos a darle bienvenida a los ciudadanos centroamericanos, si cumplen con las leyes”.
“Estados Unidos enfrenta una crisis en la frontera sur. La mayoría de personas que ingresan de manera ilegal provienen de sus países”, reprochó.
Pence recordó que durante este año más de 150.000 guatemaltecos, hondureños y salvadoreños han abandonado sus hogares para emprender “un viaje peligroso” e intentar ingresar a Estados Unidos de forma irregular.
Añadió que muchos piden asilo, pero pocos están escapando de una persecución real. También mencionó que entre esa ola de migrantes hay integrantes de pandillas como la Mara Salvatrucha.
“Les digo a los presidentes que este éxodo tiene que terminar. Es una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos. Nosotros respetamos su soberanía, sus fronteras, insistimos que ustedes respeten la nuestra”, enfatizó.
El vicemandatario agregó que la migración legal es “bienvenida” por el gobierno de su país. “El año pasado Estados Unidos recibió más de un millón de migrantes legales, incluyendo casi 50.000 de Guatemala, Honduras y El Salvador”, subrayó.