En el primer cuatrimestre del año los venezolanos fueron los extranjeros a los que más residencias uruguayas se les otorgó, según datos oficiales.
Ya desde el año pasado cuando recrudeció la crisis política, económica y social del gobierno del presidente Nicolás Maduro, aumentó sistemáticamente la cantidad de venezolanos que vinieron a vivir a Uruguay.
En 2018, entre enero y abril de acuerdo a información de la cancillería, se tramitaron 5.326 residencias y prácticamente la mitad correspondió a venezolanos. En ese período, 2.486 venezolanos accedieron a los documentos para trabajar en Uruguay.
Oficialmente se reconoce un incremento de la llegada de extranjeros, según lo dijo a la Voz de América Jorge Muiño, director de asuntos consulares del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Uruguay desarrolla una política de puertas abiertas a los migrantes y les facilita la documentación para que puedan quedarse y empezar a trabajar.
“Residencia gratuita, no se les pide medios de vida, no se les pide carnet de salud, se puede hacer desde un consulado. Se da una cédula provisoria cuando inicia el trámite y cuando se le concede la residencia se le da la cédula definitiva”, dijo Muiño.
Desde el primer día tienen acceso a los servicios de educación y salud gratuitos. Muchos venezolanos utilizan de inmediato los hospitales.
Gabriela es una joven venezolana que llegó hace unos meses a Uruguay con su esposo. Dijo que es cierto que en su país faltan los productos básicos y que deben hacer colas durante horas para entrar al supermercado.
Le preguntamos ¿Qué la impulsó a dejar a su país?
“Por la crisis. Era muy, muy complicado. Tenía un trabajo que me gustaba muchísimo, profesionalmente estaba bien, pero el sueldo que tenía no me alcanzaba ni para 15 días de comida”, dijo.
Gabriela, que ahora trabaja en una agencia de publicidad, dijo que contempló varias opciones de latinoamerica para emigrar.