El complejo volcánico Santa María y Santiaguito mantiene alta expulsión de lava, y en los últimos meses ha construido un flujo de este material que se desplaza a lo largo del cauce San Isidro, con una longitud de 3385 metros, informó el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).
Se indicó que debido a la forma del flujo, se acumula en bloques apilados inestables, que podrían colapsar y provocar avalanchas y expulsión de piroclásticos débiles a moderadas de forma frecuente, lo que propiciaría incandescencia y emisión de ceniza fina.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) pide a la población que habita en las áreas aledañas al complejo volcánico que evite acercarse, transitar por las barrancas o detenerse a tomar fotografías ante una situación de riesgo.
Con información y fotografía del diario de centro américa.