TGW | Entre el 15 de enero y el 31 de julio de 2024, la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fuerza Élite del Sistema Penitenciario (SP) han realizado más de 98 requisas en centros carcelarios de Guatemala. Estas operaciones, llevadas a cabo en colaboración con diversas divisiones de la PNC y otras entidades gubernamentales, tienen como objetivo principal fortalecer las inspecciones y asegurar la seguridad en los 22 centros penitenciarios del país.
Las requisas buscan localizar objetos prohibidos que podrían estar ocultos en lugares inusuales como caletas, tragantes, paredes, tuberías, árboles y bajo tierra. La incautación de estos artículos es crucial para prevenir que los reclusos los utilicen para alterar la paz y la seguridad tanto dentro como fuera de los centros penitenciarios.
Control en “El Infiernito”
Entre las operaciones más destacadas se encuentra la recuperación del control total del Centro de Alta Seguridad Canadá, conocido como “El Infiernito”, el 2 de junio. Durante esta requisa, se encontraron objetos no permitidos como equipos de sonido, aire acondicionado, refrigeradoras y animales exóticos y de granja. En total, se trasladaron 225 miembros de la Pandilla del Barrio 18 bajo estrictas medidas de seguridad.
Francisco Jiménez, ministro de Gobernación, subrayó la importancia de este logro, destacando que por primera vez en más de una década, el Estado de Guatemala ha recuperado el control total de “El Infiernito”. Este avance es un hito en la gestión penitenciaria del país y sienta las bases para futuras mejoras en la seguridad y administración de las cárceles.
Actualmente, se están llevando a cabo trabajos de renovación en “El Infiernito” para convertirlo en un centro penitenciario de máxima seguridad. Las reformas incluyen la modernización de infraestructuras y la implementación de nuevas medidas de seguridad, con el objetivo de prevenir cualquier actividad ilícita y garantizar un entorno seguro tanto para los reclusos como para el personal penitenciario.
El compromiso del Gobierno con la seguridad carcelaria se refleja en la constancia y rigor de las requisas. Estas acciones no solo buscan incautar objetos ilícitos, sino también disuadir a los reclusos de intentar introducir y utilizar estos artículos. Este enfoque integral es fundamental para mantener el orden dentro de los centros penitenciarios y proteger a la sociedad en general.
Los resultados obtenidos hasta la fecha demuestran el impacto positivo de las requisas y el trabajo conjunto de las autoridades. La recuperación de “El Infiernito” y las reformas en curso son ejemplos concretos de los avances logrados. No obstante, las autoridades reconocen que aún queda trabajo por hacer y se comprometen a continuar con las inspecciones y mejoras necesarias para asegurar un sistema penitenciario eficiente y seguro.
Las más de 98 requisas realizadas este año representan un paso significativo hacia el fortalecimiento de la seguridad y el control en los centros penitenciarios de Guatemala, asegurando que los reclusos no puedan utilizar objetos ilícitos para alterar la paz y seguridad de los ciudadanos.
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