TGW DIGITAL | Hasta las 10:00 am de este jueves se han registrado 39 sismos de diversa magnitud, en las costas de El Salvador, luego del temblor de 6.1 grados en la escala de Richter que se produjo el pasado miércoles, impactando gran parte del territorio salvadoreño y siendo perceptible en países vecinos como Guatemala, Honduras y Nicaragua.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) informó que el movimiento telúrico inicial ocurrió a las 15:57 hora local, con un epicentro ubicado a 70 kilómetros al sur de la playa Mizata, en el departamento de La Libertad, y a una profundidad de 13 kilómetros. A pesar de la magnitud del sismo, el MARN aclaró que no existe amenaza de tsunami para el país.
Posterior al evento principal, se registraron treinta y nueve réplicas en la misma zona, con magnitudes que oscilaron entre 3.9 y 4.6 grados en la escala de Richter y profundidades de entre 13 y 25 kilómetros. Todos los sismos se localizaron frente a la costa del departamento de La Libertad.
Respuesta oficial y evaluación de daños
El presidente de la República, Nayib Bukele, informó a través de su cuenta en la red social X (anteriormente Twitter) que no se han reportado daños materiales significativos ni víctimas a consecuencia del sismo. “Electricidad, telefonía, internet, todo funcionando con normalidad”, afirmó el mandatario, buscando llevar calma a la población.
A pesar de que no se han registrado daños ni víctimas, diversos usuarios de redes sociales señalaron que el sismo se sintió con particular fuerza en algunas zonas del país.
Impacto en la región y antecedentes sísmicos
El sismo también fue percibido en ciudades como Guatemala, Tegucigalpa (Honduras) y Managua (Nicaragua), según los datos recogidos por el MARN. Es importante destacar que la actividad sísmica en El Salvador, frecuentemente originada en el océano Pacífico, suele producirse a profundidades mayores.
El Salvador tiene una historia marcada por eventos sísmicos significativos, siendo los terremotos de 2001, con magnitudes de 7.7 y 6.6 grados, los más devastadores en la memoria reciente del país.
Las autoridades salvadoreñas continúan en alerta, monitoreando la actividad sísmica y evaluando posibles réplicas, mientras la población permanece atenta ante cualquier eventualidad adicional.
VEA TAMBIEN
Con la ampliación presupuestaria MSPAS mejorará capacidad de atender a pacientes renales crónicos