En segundo y tercer lugar quedan Londres y París. El dato surge del Índice de las Ciudades en Movimiento (CIMI por sus siglas en inglés) realizado por el Centro de Globalización y Estrategia en la Escuela de Negocios de la Universidad de Navarra. Se trata del quinto informe que hace esta entidad e incluye, en esta edición, 165 ciudades de 80 países.
El top ten se completa con Tokio (Japón), Reikiavik (Islandia), Singapur (Singapur), Seúl (Corea del Sur), Toronto (Canadá), Hong Kong y Amsterdam (Holanda).
Salvo por Canadá y Nueva York, los primeros puestos están en ciudades de Europa y Asia.
Completan el ranking de las 30 más inteligentes: Berlín, Alemania; Melbourne, Australia; Copenhague, Dinamarca; Chicago, Estados Unidos; Sídney, Australia; Estocolmo, Suecia; Los Ángeles, Estados Unidos; Wellington, Nueva Zelanda ; Viena, Austria; Washington, D.C., Estados Unidos; Boston, Estados Unidos; Helsinki, Finlandia; Oslo, Noruega; Zurich, Suiza; Madrid, España; Barcelona, España; San Francisco; Estados Unidos; Auckland, Nueva Zelanda; Berna, Suiza y Dublín, Irlanda.
América Latina no está presente entre los 30 ni los 50 más destacados de esta medición.
El primer lugar de la región es para Buenos Aires que, en el ranking mundial, se encuentra en el puesto 76. Le siguen Santiago de Chile (86) y la ciudad de Panamá (94).
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El peor posicionado de América Latina es Caracas, Venezuela (162), Santo Domingo, República Dominicana (154); La Paz, Bolivia (152) y Belo Horizonte, Brasil (151).
A su vez, los tres últimos lugares a nivel mundial son para Karachi, Pakistán; Lagos, Nigeria y Calcuta, India.
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Para llevar adelante el estudio se contemplaron 83 indicadores que evalúan no solo el nivel de tecnología e innovación sino también la calidad de movilidad, transporte, planeamiento urbano, economía, gobierno, gestión pública, medio ambiente, cohesión social y capital humano.
Dentro del rubro tecnología, entre los indicadores figuran el nivel de acceso a internet, puntos de accesos wifi, suscripción a banda ancha, usuarios con dispositivos móviles y cuentas en redes sociales y hasta cantidad de tiendas Apple.
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“La tecnología es una dimensión integral del CIMI, es un aspecto de la sociedad que mejora la calidad de vida actual y su nivel de desarrollo o expansión es un indicador de la calidad de vida alcanzada o potencial. A su vez, el desarrollo tecnológico es una dimensión que le permite a las ciudades ser sustentables a lo largo del tiempo y mantener o extender sus ventajas competitivas”, se destaca en el documento.
Según se detalla en el informe, el objetivo es crear consciencia con el fin de propiciar un modelo de gestión y modelo urbano para el siglo XXI basado en cuatro factores esenciales: ecosistema sustentable, actividades innovadoras, equidad entre los ciudadanos y conexión territorial.
“Las ciudades inteligentes generan numerosas oportunidades comerciales y posibilidades para la colaboración entre los sectores públicos y privados“, se lee en el texto. Y continúa: “Estamos convencidos de que podemos vivir en mejores ciudades, pero esto será posible solo si todos los actores sociales: el sector público, las compañías privadas, las organizaciones cívicas y las instituciones académicas contribuyen y colaboran para alcanzar un objetivo en común”.