Una nueva filtración de datos, de unas 55.000 tarjetas de crédito, fue detectada en Chile, donde el miércoles pasado se dio cuenta de que la información de unas 14.000 tarjetas había sido publicada por una agrupación de hackers de EEUU.
(SBIF) confirmó este domingo que la nueva filtración se detecto este sábado y precisó que de un total de 55.106 tarjetas de crédito y débito afectadas, 54.593 correspondían a cuentas extranjeras.
“El conjunto de los documentos filtrados estaba compuesto mayoritariamente por tarjetas de crédito, aunque hay también algunas tarjetas de débito”, precisó la SBIF en un comunicado.
Aseguró además que la “mayoría” de las tarjetas afectadas se encuentran inactivas y que de las 513 tarjetas chilenas filtradas, 188 son bancarias.
“Los bancos ya han procedido al bloqueo de las cuentas que se encontraban activas”, añadió e indicó que se continúa trabajando para encontrar los antecedentes que permitan aclarar lo sucedido.
La SBIF dijo que este mismo sábado se detectó otra situación similar, con unas 4.149 tarjetas, pero luego se comprobó que se trataba de parte de las afectadas la primera vez, es decir, “no se trataba de nuevas tarjetas”.
Los antecedentes de la nueva filtración serán puestos en conocimientos de la Justicia, en el marco de una denuncia presentada el pasado jueves, señaló la SBIF.
Agregó que las autoridades siguen en contacto con los emisores y operadores de las tarjetas de crédito y débito nacionales y que mantendrán al público “oportunamente informado”.
La primera filtración, según la SBIF, fue obra del “grupo de cibercriminales denominado ShadowBrokers, que publicó el número de tarjeta, el número de seguridad (CVV) y la fecha de expiración” de unas 14.000 tarjetas de unos 19 emisores bancarios y no bancarios, algunos de ellos extranjeros.
La mayoría de las tarjetas estaban inactivas, dijeron en esa oportunidad las autoridades, que precisaron que el aludido grupo de hackers fue fundado a fines de 2015 y se ha adjudicado filtraciones de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Tanto la SBIF como la empresarial Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) han asegurado que las tarjetas activas fueron bloqueadas de inmediato y que hasta ahora no se ha detectado que alguien haya tratado de operar con alguna de ellas.
De las 14.000 tarjetas afectadas en ela primera filtración, 2.480 estaban activas al momento del ataque. No obstante, todas fueron bloqueadas y los bancos anunciaron que entregarán nuevos plásticos a sus clientes.
En junio pasado, el Banco de Chile -uno de los más importantes del país- fue víctima también de un ataque cibernético masivo que acabó en el robo 10 millones de dólares.