Se juega el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League entre el Paris Saint Germain y el Real Madrid, donde el club blanco visitará el Parque de los Príncipes con la ligera ventaja de haberse impuesto por 3-1 en el Santiago Bernabéu. Sin el brasileño Neymar, el elenco francés buscará la remontada para no caer en el certamen que más lo obsesiona.
Ganar el título más prestigioso de Europa es para ambos el objetivo que más anhelan. El Real Madrid, alejado del liderazgo de la Liga española y eliminado de la Copa del Rey, solo desea resucitar ese fuego particular que tiene con la Liga de Campeones, ese trofeo que ha ganado más veces que nadie, incluidas las dos últimas ediciones.
El Real Madrid busca los cuartos de final por octava vez consecutiva y confía en Cristiano Ronaldo para lograrlo. El portugués recuperó su pegada en el momento clave de la temporada y llega a la gran cita, tras firmar un doblete en la ida y en medio de un comienzo de año espectacular: 14 goles en 10 partidos.
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Las dudas de Zinedine Zidane pasan por el mediocampo, ya que dos jugadores imprescindibles como el croata Luka Modric y el alemán Toni Kroos no llegan en las mejores condiciones.
El desgaste del duelo de ida les pasó factura, también a Marcelo que llega a tiempo para ocupar el flanco izquierdo. El técnico francés debe decidir si arriesgar, con Kroos con algo más de opciones al superar un problema articular y no muscular como Modric, o mantener su apuesta de los últimos partidos por Mateo Kovacic y un 4-4-2 con Lucas Vázquez en la derecha.
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El PSG, por su parte, tiene lograr en la capital francesa lo que se presenta como una hazaña. Sin su máxima estrella, buscarán una victoria para seguir en carrera en el trofeo que más desea el proyecto qatarí, que no se conforma con los tres últimos títulos nacionales y con estar encaminado hacia la obtención de un nuevo campeonato francés. Sólo la gesta europea podría justificar la multimillonaria inversión de la entidad.
Con Neymar lesionado, los focos se han puesto en el argentino Ángel Di María, quien desde que comenzó el año ha marcado un gol por partido y jugará ante su ex equipo. Será el tercer componente de un tridente en el que también estarán el uruguayo Edinson Cavani y el francés Kylian Mbappé, pese a las molestias que arrastra en el tobillo.
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