La profundización de la crisis cambiaria de Turquía hizo caer el lunes a las acciones en los mercados internacionales y a las divisas de los países emergentes, al mismo tiempo que subían los precios de los bonos alemanes y otros activos de refugio.
El índice bursátil mundial MSCI, que incorpora acciones de 47 países, cayó 8 décimas en la sesión y ha perdido un 1.8 por ciento desde la apertura del viernes, cuando la lira turca cayó a un mínimo histórico y llevó al ministro de Finanzas del país a anunciar medidas para calmar el mercado.
La lira se ha desplomado por las preocupaciones sobre la intervención creciente del presidente Tayyip Erdogan en la economía y el deterioro de las relaciones con Estados Unidos. La moneda llegó a retroceder hasta un 12 por ciento el lunes, pero luego redujo las pérdidas a un 8.5 por ciento.
Las acciones de los mercados emergentes perdieron un 1.97 por ciento el lunes.
En Estados Unidos, los nuevos máximos alcanzados por Apple y Amazon no fueron suficientes para compensar los descensos de las compañías financieras que son las más propensas a verse afectadas por la fuerte caída en la lira.
El euro cayó a un mínimo de un año frente al dólar y al franco suizo. Los bonos gubernamentales para refugio estuvieron en demanda y los rendimientos de la deuda alemana a 10 años, el punto de referencia para la zona del euro, cayeron a un mínimo de un mes.