El Gobierno de Etiopía ha anunciado que liberará a un número no determinado de presos políticos como gesto de consenso nacional y que cerrará una conocida cárcel donde organizaciones internacionales denunciaban que se llevaban a cabo torturas, informan medios locales.
Tras años de protestas contra el gobernante Frente Democrático Revolucionario Etíope (EPRDF), una coalición de cuatro partidos regionales de distintas etnias, su presidente y primer ministro del país, Hailemariam Desalegn, indicó hoy que esta medida pretende “construir el consenso nacional y ensanchar la plataforma democrática”.
“Se ha tomado la decisión de retirar cargos e indultar a algunos políticos encarcelados”, indicó Desalegn en una rueda de prensa celebrada hoy.
La cadena de televisión FBC, vinculada al EPRDF, no mencionó ni el número total de indultados ni quiénes son, pero indicó que la medida afecta a políticos condenados por la Justicia y otros individuos.
Asimismo, el Ejecutivo decidió cerrar el complejo de Maekelawi (“central”, en amhárico), situado en la capital, Adís Abeba, compuesto de una conocida cárcel y un centro de investigación, que, según organizaciones internacionales, se utilizó para llevar a cabo torturas en tiempos de anteriores regímenes y también del actual.
En su lugar, se construirán un museo y también un centro de investigación que cumplirá con los estándares internacionales.
La noticia ha sido recibida con júbilo por parte de ONGs como Amnistía Internacional (AI), que considera que el cierre de esta “cámara de torturas” podría suponer la apertura de un nuevo capítulo para los derechos humanos en este país del África oriental.
“Este anuncio podría suponer el fin de una era de represión sangrienta en Etiopía. Muchos de los prisioneros que llevan años en la cárcel a causa de cargos con motivaciones políticas solamente fueron detenidos por ejercer sus derechos humanos pacíficamente, y jamás deberían haber entrado en prisión”, indicó el investigador de AI para Etiopía, Fisseha Tekle.
“Reclamamos a las autoridades etíopes que implementen esta decisión lo antes posible mediante su excarcelación inmediata e incondicional, y que abolan las leyes represivas bajo las que fueron encarcelados”, pidió Tekle.
Asimismo, AI exigió que estas medidas no sirvan para “maquillar los horribles hechos que han tenido lugar en Maekelawi” y que se lleve a cabo una investigación efectiva sobre las torturas para que los responsables sean llevados ante la Justicia.
Por: Vicky C.