Era la noche del 16 de julio de 1992, cuando explotaron dos vehículos, cargados cada uno con cientos de kilos de explosivos, en la calle Tarata, distrito de Miraflores, Lima.
Los hechos, que después serían conocidos como “Atentado de Tarata”, dejaron25 personas muertas y 155 heridas.
Tuvieron que pasar 26 años para que, este martes, la Sala Penal Nacional de Perú condenara por los atentados a cadena perpetua a la cúpula de Sendero Luminoso, incluido el fundador del grupo guerrillero, Abimael Guzmán.
El tribunal condenó por terrorismo agravado a Guzmán, de 84 años; a su esposa y número dos de Sendero, Elena Iparraguirre; a María Pantoja, Laura Zambrano, Florindo Eleuterio Flores Hala, Florentino Cerrón Cardoso, Edmundo Cox, Osmán Morote, Margot Liendo y Óscar Ramírez Durand.
La sala les impuso el pago solidario de US$117 millones para la reparación civil, y los absolvió del delito de tráfico ilícito de drogas para fin.