Cuba comenzó a implementar el acceso a Internet desde teléfonos celulares entre algunos clientes y ha prometido el lanzamiento del servicio a nivel nacional para fines de año, un paso importante hacia la apertura de uno de los países con menos conectividad del hemisferio occidental.
Periodistas de los medios de comunicación estatales estuvieron entre los primeros en tener Internet móvil, proporcionada por el monopolio cubano de telecomunicaciones, como parte de una campaña más amplia por un mayor acceso a la red que impulsa el nuevo presidente Miguel Díaz-Canel.
Los analistas dicen que un acceso web más amplio debilitará en última instancia el control gubernamental sobre qué información llega a las personas en el estado insular, donde un partido tiene el monopolio de los medios. Cuba desaprueba la disidencia pública y bloquea el acceso a sitios web disidentes.
Los clientes de pospago, que incluyen desde empresas y embajadas hasta organizaciones no gubernamentales, han podido contratar planes de datos limitados desde diciembre, lo que les da acceso a algunas aplicaciones en línea, según el sitio web del monopolio cubano de telecomunicaciones, Etecsa.
La vicepresidenta de Etecsa, Tania Velázquez, había dicho en junio a medios estatales que la empresa anunciaría pronto cuándo ampliaría el servicio a los 4,5 millones de clientes de telefonía móvil, casi la mitad de la población de Cuba. Etecsa no respondió a requerimientos de más detalles.
Por la falta de inversiones, el embargo comercial de Estados Unidos y las preocupaciones por el flujo de información, Cuba se ha quedado rezagada en el acceso a Internet. Hasta 2013, en gran medida solo estaba disponible para el público en los hoteles turísticos.
El gobierno ha hecho que la creciente conectividad sea una prioridad con la introducción de zonas de navegación, puntos de acceso WiFi al aire libre y la conexión desde los hogares a la red.
“Ojalá que (Internet en celulares) llegue pronto”, dijo Ramón Lamar, un operario de La Habana que como la mayoría de los cubanos se conecta en puntos WiFi. Lamar se quejó de lo trabajoso que resulta conectarse debido al calor, los mosquitos y la falta de privacidad.
En un documento de 2015 sobre la estrategia de Internet se filtró que el gobierno cubano apuntaba a conectar al menos la mitad de las viviendas para 2020, así como el 60 por ciento de los teléfonos.
Pero muchos cubanos son escépticos. La presidenta de Etecsa, Mayra Averich, dijo a medios estatales que había conectado sólo 11.000 hogares el año pasado.
“He estado muchas veces en la tienda de Etecsa para preguntar si pueden darnos acceso en la casa”, dijo Yuneisy Galindo, de 28 años, en un punto WiFi en una calle de La Habana con su niño pequeño en brazos. “Pero nos comentan que todavía no están listos y que nos llamarán”, dijo.
Otros dicen que el ritmo es demasiado lento. Cuba está instalando solo tecnología 3G, pese a que la mayor parte de América Latina se ha cambiado a 4G, en tanto, la red 5G está en sus etapas finales de prueba.