TGW Digital – La Embajada de Israel por medio de su Agencia Israelí de Cooperación Internacional para el Desarrollo (MASHAV) y The Philos Project, en alianza con la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), y su socio Project Concern International (PCI a Partner of Global Communities), en el marco de esta alianza, MASHAV donó 46 tanques de recolección de agua de lluvia (de 2,500 litros cada uno), permitiendo que 46 familias tengan disponibilidad de agua para el consumo, lavado de manos, prácticas sanitarias, y riego.
Estas familias viven en cuatro aldeas del Corredor Seco de Huehuetenango. Dichas comunidades se encuentran afectadas por la escasez del recurso hídrico, lo que agudiza su situación de vulnerabilidad en inseguridad alimentaria. Esta alianza permitirá a las familias beneficiadas mejorar su seguridad alimentaria, higiene y saneamiento.
Miguelina Gómez, residente de la aldea Tierra Blanca en el municipio de Santa Bárbara, señaló que durante más de ocho años ha estado obligada a “salir para buscar agua dos o tres veces por semana, caminando por más de una hora hasta llegar al río y luego regresar con los tinacos llenos de agua.”
#Donación Las Embajadas de Israel y Estados Unidos por medio de sus agencias de Cooperación @MASHAVisrael y @USAIDGuate, y la ONG @philosproject, efectuaron la ceremonia de entrega de 46 sistemas de recolección de agua de lluvia a familias del Corredor Seco en Huehuetenango. pic.twitter.com/7dsHKBHc8h
— Israel in Guatemala (@IsraelinGT) April 22, 2021
Jesse Rojo, Director de Asuntos Hispanos The Philos Project, quien conoció de cerca las historias de estas comunidades y acompañó el proceso de instalación de los cosechadores en algunas viviendas, expresa “habiendo visto los caminos riesgosos, el arduo trabajo y el deterioro físico que pasan estas mujeres para buscar agua en un pequeño pozo cinco veces al día, este proyecto ha cobrado nuevo sentido para este citadino, que nunca ha tenido que dar más de diez pasos para tener un vaso de agua”. Finalmente destacó que “los cosechadores de agua hacen más que cosechar el agua, unen a la familia, combaten la pobreza, y empoderan a la comunidad a soñar con un nuevo futuro.”
El proyecto “Sigamos” brinda una solución a la escasez de agua y a la emergencia de crisis alimentaria para familias en extrema pobreza en la región de Huehuetenango y genera un impacto positivo en la calidad de vida de las comunidades.