Cada 4 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Obesidad para crear conciencia sobre la importancia de combatir esa enfermedad que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. En ese marco, la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional de la Presidencia de la República (Sesan) destaca cuatro acciones incluidas en la actualización de la Política Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Polsan).
Para este año, dicha conmemoración tendrá por lema “Perspectivas cambiantes: hablemos de la obesidad”, con el argumento que “cuando hablamos, debatimos y compartimos, podemos cambiar de opinión, cambiar las normas y transformar los resultados de salud”, según la Federación Mundial de Obesidad.
La Sesan lideró la reciente actualización de la Polsan, en la cual se plantea entre sus ejes y líneas de acción la prevención y atención del sobrepeso, la obesidad y enfermedades no transmisibles. Con el fin de combatir esta enfermedad y para ello se promueven las siguientes acciones:
- La mejora del diagnóstico oportuno
- La promoción continua e intensiva de las medidas de prevención y control
- La focalización de las intervenciones preventivas así como facilitar el manejo y tratamiento integral
- La eliminación del estigma y la discriminación hacia niñas, niños y adultos con sobrepeso y obesidad
En Guatemala, el sobrepeso y la obesidad afectan a gran parte de la población y según datos proporcionados por el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, el 40 por ciento de menores de entre 7 y 11 años padecen de este mal, mientras que la cifra en adolescentes de entre 13 y 15 años se sitúa en 29.4 por ciento con sobrepeso y 8.4 por ciento con obesidad. Los datos para mayores de 18 años son de 38.4 por ciento de sobrepeso y 28.8 por ciento de obesidad.
“Esta enfermedad es crónica, compleja, multifactorial y no transmisible que afecta actualmente a un gran porcentaje de la población mundial y que puede repercutir en la salud de los guatemaltecos propiciando el aparecimiento de otros padecimientos”, indicó la coordinadora del Programa Nacional para la Prevención de Enfermedades Crónicas no Transmisibles y Cáncer del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), Rocío Donis.
Sobre la alimentación, la especialista afirmó que “debe ser saludable y equilibrada, y que es importante la inclusión de todos los tipos de alimentos como verduras, frutas, granos, tubérculos y carnes.” Y agregó que “es importante evitar los alimentos ultraprocesados, altos en grasas saturadas, ricos en azúcares y que contengan grasas trans” para prevenir el sobrepeso y la obesidad.
Guatemala cuenta con las Guías Alimentarias, que son un instrumento educativo para que la población pueda elegir los alimentos para una dieta saludable y están dirigidas a la población sana mayor de dos años. Esta herramienta promueve el consumo de una alimentación completa, saludable, variada y culturalmente aceptable, para evitar los problemas de malnutrición y prevenir las enfermedades crónicas no transmisibles en jóvenes y adultos.