La consulta popular que se realizará el próximo 15 de abril debe ser positiva para dar el primer paso en la solución del diferendo territorial, insular y marítimo entre Guatemala y Belice, indicó una fuente diplomática.
Hace 10 años los gobiernos de ambos países firmaron un acuerdo especial ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) en el que se comprometieron a llevar el litigio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
“Para aceptar la jurisdicción compulsoria de la CIJ es necesario hacer una consulta popular. Si el resultado fuera negativo, tendremos que seguir trabajando para que se repita, porque es necesario que la consulta sea positiva”, expresó Rafael Antonio Salazar, asesor de la Unidad de Soberanía y Dominio del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex).
El diplomático explicó que si en la consulta popular gana el sí, los guatemaltecos estarán dando su aval para que la CIJ resuelva el diferendo en definitiva.
“Actualmente no tenemos certeza jurídica, pues no hay fronteras con Belice y es necesario establecerlas. La certeza jurídica traerá seguridad, inversión y desarrollo para toda la región del lado de Guatemala y de Belice”, afirmó.
Reclamo
Los registros del Minex señalan que el litigio entre ambas naciones tiene más de 150 años. Guatemala reclama 12.272 kilómetros cuadrados del territorio beliceño, que es casi la mitad de la excolonia británica.
En octubre de 2016, el presidente Jimmy Morales, autoridades del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y la cancillería lanzaron la convocatoria para llevar a cabo la consulta popular que se efectuará el 15 de abril próximo.
Más de 7,52 millones de guatemaltecos están inscritos en el padrón electoral y aptos para emitir el voto en el referéndum.