Durante el simulacro del Tribunal Supremo Electoral (TSE) el sábado 3 de junio, el Vicepresidente del Consejo Electoral (VCE) instaló una mesa simulando una junta receptora de votos. En esta mesa, se llevó a cabo un conteo y escrutinio de votos ficticios para simular el proceso electoral.
El simulacro contó con la presencia de observadores de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE). Estos observadores se acercaron para presenciar y evaluar el proceso simulado, con el objetivo de garantizar la transparencia y la integridad de las elecciones.
El VCE y el TSE pusieron especial énfasis en la precisión y la seguridad del proceso electoral simulado. Durante el conteo y el escrutinio de votos, se siguieron todos los protocolos y se utilizaron las herramientas tecnológicas necesarias para asegurar la veracidad de los resultados.
El simulacro del TSE es parte de los preparativos para las elecciones reales, que se llevarán a cabo en una fecha posterior. Estas elecciones serán de gran importancia para el país, y se espera que se desarrollen de manera justa y transparente.
Los observadores de la PDH, la OEA y la UE jugarán un papel crucial en el monitoreo del proceso electoral real, asegurándose de que se respeten los derechos de los votantes y que se mantenga la integridad del proceso.
El simulacro del TSE es una oportunidad para identificar posibles mejoras en los procedimientos electorales y para garantizar que el sistema esté preparado para enfrentar cualquier eventualidad durante las elecciones reales.