En el día del mono (14 de diciembre) es importante concienciar acerca del valor y de los beneficios de esta especie al ecosistema y la vida de la población, resaltamos que la Ley de Áreas Protegidas (Decreto 4-89) y su Reglamento, define a la “Vida Silvestre” como a todas aquellas especies de flora y fauna que se desarrollan natural y libremente en el ecosistema, en su conjunto posee un alto valor ético, intrínseco, cultural, ecológico, educativo, científico y económico.
Los animales silvestres y las plantas silvestres, además de su valor intrínseco, contribuyen a los aspectos ecológicos, genéticos, sociales, económicos, científicos, educativos, culturales, recreativos del bienestar humano y el desarrollo sostenible, por lo que el CONAP ha implementado esfuerzos conjuntos con socios locales e internacionales.
Los monos son herbívoros, pero también consumen huevos de aves, insectos y corteza de árbol. En la actualidad existen cerca de 260 especies de monos dispersas por todo el planeta. De este total, 25 se encuentran en grave peligro de extinción. Una de sus principales funciones en la naturaleza es que son dispersores de semillas y se les puede conocer como los “agricultores de la selva”.
En Guatemala se han descrito tres especies de monos y son los siguientes:
- Mono aullador negro guatemalteco (Alouatta pigra)
- Mono aullador (Alouatta palliata)
- Mono araña de manos negras (Ateles geoffroyi)
El CONAP continúa trabajando con el firme compromiso de conservar y promover el uso sostenible de la vida silvestre del país, a través de sus distintas direcciones regionales y sub regionales a nivel nacional.