Los Gobiernos de Guatemala y México, por medio de las fuerzas armadas, fortalecerán la seguridad en sus fronteras aérea, marítima y terrestre durante el 2018, con el propósito de reforzar la seguridad y evitar el traslado de personas y productos ilícitos.
“Existen convenios de cooperación para unificar esfuerzos en la seguridad, respecto al crimen transnacional, se están gestionando mecanismos para mejorar la comunicación y protocolos entre ambos territorios”, dijo Giovanni Pérez, director de Comunicación del Ministerio de la Defensa Nacional.
El portavoz de las fuerzas castrenses informó que se programan reuniones trimestrales para planificar y coordinar acciones interinstitucionales de patrullaje, para evitar el trasiego ilegal de estupefacientes y personas.
Entre las acciones a ejecutar este año figura que ambas fuerzas de seguridad puedan cruzar la frontera marítima, tras previa coordinación, cuando se realice una persecución y que esta permita la captura de delincuentes.
También se acordó el aumento de las capacidades de las unidades en las áreas fronterizas.
“Estas acciones están bajo el artículo 244 de la Constitución Política de la República, donde detalla el resguardo de la soberanía, garantizando la presencia del Estado y protegiendo las garantías constitucionales”, dijo.
Actualmente, ambos países intercambian información, lo que ha permitido generar alertas tempranas en el combate contra la criminalidad, lográndose en 2017 el decomiso de 10.493 kilos de cocaína en Guatemala.
Protección de fronteras
México y Guatemala comparten una frontera de casi 1.000 kilómetros, siendo un porcentaje utilizado para el paso de migrantes de diferentes nacionalidades y el trasiego de droga de Suramérica hacia México y Estados Unidos, según el Departamento de Estado de Estados Unidos.
Ambos países cuentan, desde 2017, con la denominada “Fuerza de Tarea Tecún Umán”, conformada por elementos de la Policía Nacional Civil y del Ejército de Guatemala, como parte de las acciones encaminadas al combate contra el crimen organizado transnacional y narcotráfico.
Dicho grupo élite está integrado por unos 500 elementos castrenses, quienes son apoyados por agentes de la Policía Nacional Civil (PNC), personal de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), para el control del contrabando, y fiscales del Ministerio Público (MP), para los casos relacionados con la criminalidad.