Rusia está convencida de que Turquía no estuvo detrás del ataques de drones contra las instalaciones militares rusas en Siria, declaró el presidente ruso, Vladímir Putin.
“Estoy convencido de que ni los militares ni las autoridades de Turquía están relacionados de ninguna manera con este incidente”, dijo al reunirse con dirigentes de medios de comunicación rusas.
Subrayó que justo antes de llegar al encuentro debatió por teléfono esta situación con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan.
El presidente ruso señaló que “es verdad que a Turquía le corresponde controlar esta parte de la zona de Idlib”.
“Pero debo reconocer abiertamente que nosotros tampoco conseguimos controlar siempre lo que debemos controlar allí, al igual que los socios turcos tampoco lo consiguen siempre”, indicó al agregar que los turcos de momento no han instalado puestos de control en la zona algo que “no es fácil de hacer”.
El presidente insistió en que “sí que hubo provocadores, pero no fueron turcos”. “Sabemos quiénes son, sabemos a quiénes y cuánto pagaron por la provocación”, indicó. Putin denunció que el ataque contra las instalaciones rusas “estaba bien preparado”.
“Sabemos cuándo y dónde se vendieron estos aparatos no tripulados y cuántos fueron”, señaló al recalcar que los drones fueron tratados de modo que parecieran de fabricación doméstica.
El líder ruso aseveró que el ataque de drones tenía por objetivo socavar las relaciones entre Rusia, Turquía e Irán que intentan resolver la crisis siria.
“Lo comprendemos y por eso actuaremos de manera solidaria”, realzó.
A la vez, aseguró que Rusia aumentó la seguridad en sus instalaciones militares en Siria.
Asimismo, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en una conversación con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, destacó la necesidad de intensificar los esfuerzos antiterroristas tras el ataque contra la base rusa Hmeymin en Siria, comunicó el Kremlin.
“El presidente de Rusia llamó atención a los recientes ataques de las formaciones armadas ilegales contra la base aérea rusa Hemymim con el uso de vehículos aéreos no tripulados”, dice el comunicado.
En este sentido, señala la nota, se acordó “activar la coordinación de los esfuerzos entre los militares y servicios especiales de los dos países para la lucha eficaz contra los grupos terroristas en Siria”.
En la conversación Putin y Erdogan enfatizaron como prioridad la solución política para Siria.
Los madatarios subrayaron que el Congreso del Diálogo Nacional sirio, programado para el 29 y el 30 de enero en Sochi, está encaminado a dar una seria contribución a este proceso.
A su vez, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, en la conversación telefónica con su homólogo ruso, declaró que es necesario cesar los ataques del Ejército gubernamental sirio en Idlib y Guta Oriental, comunicó a periodistas una fuente de la Administración del líder turco.
El Ministerio de Defensa ruso había informado que la noche del 5 de enero se frustro un ataque terroristacon drones a las bases de Hmeymim y Tartus.
En total fueron detectados, destruidos o capturados 13 drones, diez de los cuales fueron lanzados contra Hmeymim y otros tres contra Tartus.
Rusia lanzó en septiembre de 2015 una ofensiva aérea en Siria a solicitud del presidente Bashar Asad.
Después de que el 6 de diciembre el Estado Mayor General de Rusia anunciara que todos los territorios controlados antes por los terroristas de Daesh (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países) en Siria fueron liberados, el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó un recorte del contingente ruso emplazado en el país árabe.
Sin embargo, las fuerzas rusas mantienen su presencia en la base aérea de Hmeymim y en el puerto de Tartus y podrán enviar refuerzos en caso de necesidad.
Rusia, Irán y Turquía son tres países mediadores de la tregua establecida a partir del 30 diciembre de 2016 en Siria, país que vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y a grupos terroristas.
En el marco del proceso de paz de Astaná, patrocinado también por Teherán, Moscú y Ankara, en septiembre pasado en Siria fueron creadas cuatro zonas de distensión para lograr el cese de los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y las de la oposición, afianzar el armisticio y separar a los rebeldes de los grupos terroristas.
Estas zonas abarcan el suburbio damasceno de Guta Oriental, determinadas partes al norte de la provincia de Homs, la provincia de Idlib y varias partes de las provincias vecinas (Latakia, Hama y Alepo), así como determinados distritos ubicados al sur de Siria.
Por: Vicky C.